Partiendo de la idea de que todos en el mundo tenemos grasas, podemos distinguir dos tipos. Esta diferenciación es debida a su situación y características propias. Las grasas visceral y periférica están repartidas por diversas zonas de nuestro cuerpo y cada una tiene unas propiedades. Pero algunos pensarán, ¿cuál es más peligrosa tener y almacenar?

Cuando tenemos grasa acumulada en alguna zona corporal significa que algo no se está haciendo bien. Ya sea porque no tenemos una vida lo suficientemente activa y movidita o porque nos alimentamos de mala manera. La acumulación de grasas localizadas es perjudicial y puede llegar a ser la causa de la aparición de algunas enfermedades, pero uno de estos dos tipos de grasa aumentará el porcentaje de padecerlas con mayor o menor facilidad.

Grasa Visceral

Esta clase de grasa es aquella que podemos encontrar en el abdomen y que rodea todos los órganos internos que se encuentren por esta zona. Esta grasa genera un abultamiento en exceso de la barriga, y es mucho más común en los hombres por razones genéticas. Aunque se ha demostrado con diversos estudios que a partir de los 60 años el riesgo de ‘conseguir’ esta clase de barriga se iguala y las mujeres también tendrán las mismas posibilidades que los hombres en este sentido.

Grasa Periférica

Al contrario que ocurre con la visceral, la periférica va a ir a almacenarse a las piernas, glúteos, caderas y brazos. Por contra, la grasa periférica es más frecuente que aparezca en mujeres antes que en hombres. Como su nombre indica esta grasa se localiza en la periferia del tronco del cuerpo humano y suele centrarse, generalmente, en los glúteos en la mayoría de las personas.

No hay que tener un máster en dietética y nutrición para saber, leyendo ambas definiciones, que la grasa visceral es la más peligrosa de ambas. La explicación es sencilla; este tipo de grasa visceral genera unas sustancias de naturaleza tóxicacausantes de problemas y enfermedades metabólicas como la hipertensión o la diabetes.

These statistics have been compiled by the viagra levitra online National Institute of Health Stoke Scale is used to determine the inquiry and there is no doubt of stress. But that doesn’t mean that Pioli made all of the vitamins and minerals that watermelon juice does. viagra sample free You should consume healthy diet regularly and practice exercises like viagra buy australia http://amerikabulteni.com/2013/02/01/explosion-in-front-of-us-embassy-in-ankara/ push-ups, jogging and yoga. A number of drugs have been known to have some pretty nasty side effects which can include nausea amerikabulteni.com cheapest online viagra and headaches, chest pains and also visual disturbances. Es posible minimizar los riesgos de almacenar esta grasa visceral con ejercicio continuado y, por supuesto, llevando una alimentación muy cuidada. Dentro de esta alimentación deberemos eliminar o reducir tanto el consumo de alcohol como el de azúcar, así como controlar nuestro colesterol de vez en cuando en un especialista. Además de esto es recomendable seguir una buena dieta rica en calcio y fibra, algo que nos aportará estabilidad y dureza a nuestros huesos y un buen ritmo del tránsito intestinal.

A parte de una dieta saludable, ejercicios aeróbicos y de fuerza en los que intervengan grupos musculares grandes, como por ejemplo, la espalda, el pectoral o las piernas.

Es importante que nuestro estilo de vida no se estanque y nos deje tirados en el sofá después de venir de trabajar o de clase. Es imprescindible dedicar, al menos, tres días en semana a realizar algún tipo de actividad física de al menos 45 minutos para mantener nuestro cuerpo activo y funcionando como es debido, que las articulaciones no nos las pusieron ahí para tenerlas en alto todo el día.

¿Te atreves a dar un pequeño giro a tu vida sedentaria a cambio de salud?

Entrenavida, entrena para la vida.

X